Ya era hora de volver a escribir en mi queridísimo blog sobre algún videojuego, que no olvidemos que es el tema principal sobre el cual debo escribir; y, por este motivo, el Viernes me desperté presintiendo que había llegado el momento de acabar uno de los dos juegos que tenía a nada del final pero en los que me había quedado atascada, así que, hoy toca hablar del The Legend of Zelda: Oracle of Ages.
PINKY POWER DUDES |
A todo esto, la particularidad más especial de este juego es que forma parte de la Oracle Series, por lo que la historia sólo se completa al jugar las dos partes de la saga (es decir, jugando también el Oracle of Seasons, su juego hermano) mediante contraseñas para desbloquear el final verdadero. Pero eso no quiere decir que no puedas jugarte los juegos individualmente, así que yo no voy a profundizar en este aspecto del juego, al menos por el momento, ya que no he jugado el Oracle of Seasons, aunque en realidad se trata de la primera parte.
Una vez dicho esto, y situando el juego cronológicamente después de mi querido A Link to the Past, según el Hyrule Historia, el juego comienza con que Link, con el propósito de hacerse más fuerte, decide realizar unas pruebas, y con la Fuerza del Triforce viaja hasta la tierra de Labrynna, en la cual no hay por qué preocuparse de que nos rapten a la princesa Zelda porque aquí no está, pero en cambio, es no sólo raptada, también poseída por Veran, la Hechicera de las Sombras, la Oráculo de los Tiempos: Nayru. Con el poder del viaje en el tiempo, Veran viaja al pasado y, engañando también a la joven reina Ambi, comienza el proyecto de construcción de la Black Tower, una maléfica torre que les produce estrés y agonía a los pobres trabajadores, que en realidad son los habitantes de la capital, ya que, como Veran controla el tiempo, nunca llega la hora del descanso y deben trabajar sin parar. Puede sonar de risa, pero si te paras a pensarlo, es verdaderamente malévolo, porque la misión de Veran es alimentar la Flame of Sorrow, y, tu misión, impedirlo.
Para ello, Link contará con la Harp of Ages, una arpa con la que irá aprendiendo canciones que le ayudarán a viajar en el tiempo y así poder recuperar las 8 Essences of Time y entregárselas al Maku Tree, una joven árbol que cree firmemente que Link es su prometido (?) y así crear una Maku Seed para destruir la barrera mágica de la Black Tower y poder enfrentarte definitivamente a Veran.
Durante la aventura, conoceremos toda clase de personajes que nos ayudarán, como el oso Mosh o el canguro Ricky, o la bruja Maple, a la que le tendrás que robar las pociones siempre que puedas. Y luego tenemos a Ralph, un amigo de la infancia de Nayru que se entrometerá en todo lo que pueda y más.
Cómo combinar colores como el naranja y el morado y que queden tan legendarios es un misterio que jamás podrá ser resuelto
La dificultad del juego no sólo reside en varios de los muchos puzzles de los cuales se componen las mazmorras, muchas de ellas detestables y cada una más difícil que la anterior, hasta el extremo de ser algunas unos verdaderos laberintos; también resulta que este juego prescinde de botellas vacías, por lo cual Link no puede capturar hadas. Aún así, de consuelo tenemos la tienda de la bruja que nos venderá UNA poción, porque Link no puede llevar más de una al mismo tiempo. Por otro lado, este juego también prescinde de magia, por lo que no nos tendremos que preocupar de ello, aunque a cambio tendremos semillas de distintos tipos que podremos lanzar con un canuto y que sí que tendremos que llevarles la cuenta.
El mapa de la tierra de Labrynna también cuenta con zonas de muy difícil acceso en las que tendremos que usar la cabeza y la Harp of Ages para llegar a todas partes, pero valdrá la pena con tal de reencontrarnos con viejos conocidos como los Gorones y los Zoras, que también necesitan de tu ayuda, o con otras criaturas nuevas, como los Tokay, unos despreciables seres que se encargarán de robarte en cuanto puedan.
No sólo eso, este juego cuenta con pequeños minijuegos obligatorios que cuando son opcionales resultan bastante graciosos, indudablemente el mejor de ellos es el Goron Dance, pues ¡para ganarte la confianza de los Gorones deberás bailar con ellos!
También contamos con un sidequest llamado "Trading Sequence" que tratará de realizar intercambios de objetos con los NPC que los necesiten para conseguir una mejor espada.
Y Link, a medida que avance en la aventura, conseguirá nuevos items útiles para resolver los puzzles y derrotar a los enemigos, algunos de ellos muy, muy curiosos, y me refiero a la Mermaid Suit, una cola de sirena que le permitirá a Link bucear y ser confundido por una sirena.
Por otro lado tenemos los Rings, anillos que, al ser equipados, le proporcionarán a Link alguna habilidad especial, como más fuerza al atacar con la espada, resistencia ante ciertos golpes, etc.
En cuanto a la narración de la historia, la Maku Tree se encargará de indicar tu próximo objetivo una vez consigas el objetivo anterior. Aún así, hay ciertos momentos en los que te pierdes.
Estéticamente, la gama cromática del juego es muy limitada, y, lo que me pareció más curioso, no hay ningún elemento blanco, exceptuando el texto. El color base es crema y, dejando a parte el negro, todos los personajes tienen un sólo color: Azul, Verde, Rojo o Naranja combinado con el base. Además, el juego incluye momentos ilustrados con píxel art, con no demasiados colores más, pero que le dan cierta alegría. En general, utiliza una gama cromática que resulta nostálgica en estos tiempos, y que habla de una historia más oscura de lo que parece al principio.
En cuanto a la música, volvemos a encontrarnos con temas míticos del Zelda que son reutilizados, sin ir más lejos, uno de mis temas favoritos se encuentra al principio, Title Screen, o la simpática melodía de nuestros hermanos los Goron. Luego, como siempre, tenemos temas memorables, como el Maku Tree Theme, o Under the Sea, inmediato recuerdo de Link y sus aventuras marinas como sirena entre Zoras, situación que nunca podrá ser olvidada y que a mi parecer debería de volverse a dar, lo que me recuerda el tema de Zora Village, también digno de mención. Y no olvidemos citar el Sad Theme, una melodía que te llega a lo más profundo del corazón, que se ganó mi cariño rápidamente cuando comenzó a sonar.
Tengo la consola en English porque es como el Ocarina of Time me enseñó. |
El Oracle of Ages es un juego de esos que siempre he querido jugar, y una de las razones por las cuales me compré la 2DS (a parte de por Megaman, obviously) y, a pesar de que muchas mazmorras se convirtieron en pesadillas (Lord Jabu-Jabu me viene ahora mismo a la mente), lo que más recuerdo son los buenos momentos que pasé bailando con mis hermanos los Gorones y limpiando el mar de basura para desintoxicar a los Zora; les tengo mucho cariño a ambos, quizás por herencia del Ocarina of Time, juego del cual me gustaría hablaros en algún momento. Y no hablemos de lo divertida que resultó la Trading Sequence, llena de inesperados momentos llenos de humor, como cuando aquel señor se arranca el bigote o cuando Link intenta contar un chiste.
Personalmente, aunque haya alcanzado mis expectativas, el hecho de que el verdadero Final Boss no te aparezca hasta jugar los dos juegos, dejando uno sólo incompleto, deja un amargo sabor de boca. Por otro lado, es un concepto interesante el de conectar dos juegos de esta manera, pero no podré hablar sobre ello hasta que me juegue su otra parte Oracle of Seasons, lo que quizás ocurra de aquí a unos meses, porque yo no dejo las cosas a medias, y porque ahora estoy ocupada...
Sin nada más que decir sobre esta primera (o segunda) parte de la saga Oracle, me despido para continuar con mi aventura en el Megaman 3, juego sobre el cual no tardaré en escribir.
Uno de mis Zelda favoritos *_*, es de esos que casi nadie menciona, como si no hubiera existido del todo, pero fue motivo suficiente como para que me comprara una Game Boy Color xD
ResponderEliminarPues yo de pequeña envidiaba a todos mis compañeros que tenían una Color por este juego y por el Pokémon XD
EliminarGracias a la eShop ahora hay acceso a muchos de estos títulos y es uno de los motivos por el cual me compré el 2DS(y el Megaman)
La verdad es que me ha dejado con la espinita del Oracle of Season, que eso de dejar las cosas a medias no es mi estilo.